mató la esperanza de un hecho,
inventó un futuro deshecho.
Salió así, su bravura cobarde infernal,
tristemente aceptada, normal:
Hizo de eso un defecto.
Generó, movimiento
violento en su ser,
nunca más pudo ella volver,
fue el silencio en esencia
El valor y el amor, los dos juntos pudieron ganar:
¡Chau, adiós agresor!
Y voló, siempre al viento le toca un adiós,
hay tormentas que quedan (que están),
en la arena no vive…
Pero puso amor a la vida,
a ella misma, al dolor:
¡El problema tiene solución,
es qué a gritos lo pide!
El valor y el amor, los dos juntos pudieron ganar:
¡Chau, adiós agresor!
Puso un fierro en su pecho,
mató la esperanza de un hecho,
inventó un futuro deshecho...
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